MANIFIESTO DÍA MUNDIAL DE LA SALUD MENTAL 2018
Vídeo realizado con motivo del Día Mundial de la Salud Mental 2018 para sensibilizar sobre los problemas de salud mental en jóvenes y adolescentes
"EDUCACIÓN INCLUSIVA, SALUD MENTAL POSITIVA"
En realidad, la celebración del Día Mundial de la Salud Mental es una fiesta para los que
creemos en una ciudadanía de calidad y rica en valores. Es, asimismo, una oportunidad para
proyectar sobre la sociedad una imagen nueva y positiva de lo que significa la salud mental.
¿Cómo que no?
Sin duda, y enlazando con el lema de este año, la pieza que da coherencia al conjunto es la
educación.
Entendemos por educación inclusiva un sistema donde se provee al alumnado aprendiz de espacios, entornos y apoyos efectivos para que concurra en una verdadera igualdad de oportunidades. En un medio inclusivo es el sistema quien trata de adaptarse al individuo con diferentes condicionantes, y en él se promueve un ambiente de respeto, de aprecios, de reconocimiento a las necesidades particulares; ya que todos formamos parte de la sociedad y del futuro. No son importantes los déficits, sino las proyecciones.
Cabe decir que todas las personas somos sujetos participantes del proceso educativo: escuela, familia, amigos, medios de comunicación, sanitarios... Si todos adoptamos una actitud de cooperación y apoyo, podremos decir que la salud mental siempre estuvo ahí, y que quizá fue un regalo. No se trata solo de atender a los que presenten dificultades, sino de explicar las bases para una buena salud mental del conjunto. De la educación depende la adquisición de conocimientos, la competencia profesional, y el avance de la técnica, pero también el sentido de pertenencia, el respeto a la diversidad, la inclusión, y el desarrollo de los derechos fundamentales.
Es de vital importancia que docentes y profesionales sanitarios dominen el lenguaje de la
inclusión, y que se establezcan itinerarios de formación para tal fin. Si fomentamos en la
escuela, principalmente, la sensibilidad hacia realidades distintas, y ahondamos en la asignatura de la prevención, el sueño del bienestar podrá tocarse con los dedos, y ya nadie
hablará del mundo si no es para mejorarlo.
La educación es el principal instrumento de cambio hacia horizontes más justos y equitativos.
Es cierto, la memoria de un niño, de una niña, es como un libro en blanco, que permanece
abierto en la edad de los descubrimientos. Llenemos entonces sus páginas con palabras de
comprensión, acaso la mejor medicina. Introduzcamos en el ciclo educativo elementos de
juicio que ayuden a valorar la experiencia vital de las personas, sea cual sea su condición.
La mente es un órgano en constante creación; formado por los pensamientos, por las luces
que son los recuerdos, o por las emociones. Es un órgano preparado para el aprendizaje, para
organizarnos en sociedad, y para la superación.
Sin embargo, aún hoy, una diferencia en la capacidad de respuesta ante los problemas que
genera la vida diaria es motivo de rechazo. Con la educación inclusiva se trataría de pasar de
una actitud instintiva, como es el estigma o rechazo, hacia modos más evolucionados, como
serían la paciencia o el amor.
Desde este órgano de redacción del manifiesto, el Comité Pro Salud Mental En Primera
Persona, y que creemos representa la voz de los que no tienen voz, aceptamos el reto de
fortalecer nuestras capacidades, de no bajar los brazos, ahora bien, al otro lado debe haber
una luz amiga, que nos ilumine con su calor. Está en juego la dignidad de la especie humana.
Recordatorio: El texto de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con
Discapacidad de la ONU es de obligado cumplimiento para el Estado Español. Leamos el
artículo 24 de la Convención, mirémonos a los ojos, y digamos si estamos haciendo todo lo
posible.
Elaborado por el Comité Pro Salud Mental en Primera Persona de Confederación
SALUD
MENTAL ESPAÑA.